La sandalia más descalza que fabricamos.
Flow es para quienes disfrutan de sentir el sendero bajo sus pies: cada curva, textura y cambio de terreno. Es nuestra sandalia más minimalista: fina, ligera y flexible, con la dosis justa de firmeza.
La suela de 6,8 mm está hecha de neumáticos de coche reutilizados, revestida con una plantilla textil suave que se siente bien desde el primer paso y mejora con el tiempo. No lleva acolchado, solo materiales resistentes y reactivos que se mueven naturalmente con el pie.
Si buscas una experiencia cruda y conectada con la tierra y una sandalia que desaparezca en el momento en que te la pones, Flow es la solución.
Para principiantes descalzos
Si eres nuevo en el uso de zapatos descalzos, Flow puede ser un primer paso audaz, y eso está bien.
Esta sandalia no tiene amortiguación ni soporte adicional, así que tus pies necesitarán tiempo para adaptarse. Al principio, puede sentirse diferente. Pero con el uso, los músculos del pie empiezan a activarse y fortalecerse. El movimiento se vuelve más fácil y natural.
Te recomendamos empezar poco a poco, sobre todo si estás acostumbrado a usar calzado acolchado. Y si buscas un inicio más flexible, echa un vistazo a nuestros modelos Groove o Flex.
Para uso diario
Flow es ideal para caminar a diario, especialmente si prefieres un calzado ligero y minimalista. En senderos suaves, césped o terrenos naturales, se siente como pez en el agua.
En el concreto y las calles duras de la ciudad, definitivamente notarás la diferencia. Sin acolchado, tus pies realizan más trabajo, lo que puede fortalecerse con el tiempo, pero al principio tendrás que adaptarte.
Para correr descalzo
Puedes correr con Flow. Muchos lo hacen. Es ligero, resistente y se adapta bien a senderos y caminos naturales.
El diseño está inspirado en los corredores rarámuri (tarahumaras) de México, quienes corrían distancias ultra con sandalias hechas con restos de llanta. Flow es nuestra versión moderna: el mismo espíritu, con mejor ajuste.
Dicho esto, correr con una sandalia minimalista como esta no es para todos. Si ya estás acostumbrado a correr descalzo, te resultará natural. Si no, es mejor ir aprendiendo poco a poco.
Sensación del suelo
Aquí es donde Flow realmente brilla. La suela se flexiona con el pie, brindándote respuesta desde el suelo sin interferir en tu camino.
Sentirás palos, piedras y textura, sin dolor, pero de una forma que te mantendrá presente. Con el tiempo, la plantilla se adapta a tu pie, haciendo que el ajuste sea aún más personal.
Si lo que buscas es permanecer conectado al terreno, Flow es lo más cerca que estarás sin ir descalzo.
En el agua
Flow se maneja sorprendentemente bien con el agua. La suela se agarra a superficies mojadas y la plantilla se seca rápido. Puedes caminar por arroyos, saltar desde rocas o simplemente enjuagarte después de una caminata embarrada, sin problema.